Me ha impactado bastante algo que he leído, cito a Edgar Allen Poe: “Todo lo que vemos no es sino un sueño dentro de un sueño.” Una frase que describe o muestra el contenido de este tema. Algunos escritores no lo consideran esotérico y además de ello no saben donde encasillarlo.
¿Qué es un sueño lúcido?
Se considera un sueño o sueños lúcidos a aquellos donde la persona que duerme es consciente en todo momento del sueño que tiene, así como manipular y llevar las riendas del mismo. Por lo tanto mientras duermen saben perfectamente que están soñando.
Se le da el nombre de “lúcido” haciendo referencia a consiente como su sinónimo y representan la rutina que se mantiene durante el día, mostrándose de igual modo mientras se duerme. Una de las grandes ventajas de tener dichos sueños es que sabemos de antemano que nada puede pasar, ya que manejamos la situación.
¿Cómo tener sueños lúcidos?
Se pueden presentar de forma espontánea o bien pueden ser inducidos, mediante ejercicios y unas prácticas para llevarlos a cabo de una forma fácil y sencilla. De forma general se dan en la etapa de sueño conocida como “sueño paradójico”, dicha fase es más reconocida como REM.
En esta fase los ojos de la persona que sueña se mueven de una forma muy rápida, es el momento de máxima relajación, pueden despertar de una forma muy fácil. Se da con una exactitud de tiempo de una hora y media después de habernos dormido.
Fenómenos que se le asocian
Se suelen presentar algunos fenómenos que son asociados a los sueños lúcidos. Las experiencias extra corporales cuentan con la característica que aporta la sensación de salir del cuerpo y visualizar el entorno desde un punto de vista diferente, no se debe de confundir este fenómeno con viajes astrales, encontrarán información en Viajes Astrales.
También se le asocian fenómenos como:
- Sueños de falso despertar; creemos habernos despertado en la vigilia, pero tan solo es la transición a un cambio de sueño.
- Sueños prelucidos.
- Parálisis del sueño; son momentos en los que sentimos que no podemos movernos ni hablar, generalmente se da antes de despertarnos y justo cuando nos dormimos.
Ejercicio
Existe una amplia cantidad de ejercicios para la inducción al sueño lúcido, uno de los más fáciles es escribir una “D” en la palma de la mano, preguntarse si está despierto o dormido y darse cuenta de que se está soñando. Una vez se diferencie el sueño podremos controlarlo.
Más adelante profundizaré en el tema, sobre qué se puede soñar, formas de inducción y ejercicios que nos lleven a dominar por completo lo que soñamos.
No hay comentarios :
Publicar un comentario